Sugiere chef menú mexicano ligero para cena de gala a Obama "El objetivo es dar calidad y calidez con productos originarios de México, sus sabores, sus colores. Por ello es indispensable que el chef encargado de esa cena cuide mucho el término de los alimentos, ya sean carnes, pollo, pato, pescado, langosta, camarones", indicó Alexandra Rendón de Lombard.
La comida mexicana contiene sabores fuertes que para el paladar de un extranjero pueden ser agresivos, por eso la chef Alexandra Rendón de Lombard recomendó un menú ligero para la cena de gala que se ofrecerá al presidente de Estados Unidos, Barack Obama.
En entrevista con Notimex, señaló que debe servirse comida mexicana internacionalizada con platillos muy decorativos y, lo principal, que esté muy sabrosa.
"El objetivo es dar calidad y calidez con productos originarios de México, sus sabores, sus colores. Por ello es indispensable que el chef encargado de esa cena cuide mucho el término de los alimentos, ya sean carnes, pollo, pato, pescado, langosta, camarones", indicó.
Rendón de Lombard consideró que no se debe fallar en el término del alimento que se prepare, además de que el sazón es importantísimo, por lo que no se debe agregar mucho picante ni especias y evitar en el menú salsas, moles y chiles muy picosos.
"Por experiencia he participado en eventos internacionales con menús de comida mexicana, y lo que nunca se debe dar es un mole. A un extranjero le puede chocar por ser dulzón, picoso, tener muchas especias, la primera vez que lo prueban no es lo máximo", insistió.
A fin de destacar los sabores de México no sólo en los alimentos, también se debe ofrecer un buen vino mexicano, por lo que recomendó como aperitivo champaña con un toque de licor de Xaica, que es un licor de Jamaica.
Al principio "daría unas botanas mexicanas que consistirían en una tostadita de cheviche verde, sin chile, unos sopecitos de chilorio con dos rajas poblanas que no piquen y una quesadilla de masa azul rellena de flor de calabaza con champiñones o pollo", dijo.
Como entrada propuso una ensalada de variedad de lechugas con una codorniz adobada (pieza completa por persona), aderezadas con una vinagreta de achiote.
De plato fuerte sugirió pato en mole amarillo traído de Oaxaca, porque no es tan agresivo, ni tan dulzón, ni tan picante como el negro o el verde.
Ese mole iría acompañado de una guarnición de arroz con variedad de hongos mexicanos, pues "a diferencia de otros países tenemos una gran variedad en México y aunque ahora no es temporada se pueden encontrar deshidratados, como el morilla, además de incluir champiñones y setas", detalló.
Como bebida, la chef consideró ideal el vino de Piedra, de la Casa de Piedra de Baja California, cuya primer cosecha es de 1997. El broche de oro sería un pastel de chocolate, producto originario de México y apreciado en todo el mundo, "con crujiente de avellana con salsa de café de Chiapas o de Veracruz, o salsa de vainilla de Jalapa", cuyo precio total sería de mil pesos por persona, puntualizó Alexandra Rendón.
La comida mexicana contiene sabores fuertes que para el paladar de un extranjero pueden ser agresivos, por eso la chef Alexandra Rendón de Lombard recomendó un menú ligero para la cena de gala que se ofrecerá al presidente de Estados Unidos, Barack Obama.
En entrevista con Notimex, señaló que debe servirse comida mexicana internacionalizada con platillos muy decorativos y, lo principal, que esté muy sabrosa.
"El objetivo es dar calidad y calidez con productos originarios de México, sus sabores, sus colores. Por ello es indispensable que el chef encargado de esa cena cuide mucho el término de los alimentos, ya sean carnes, pollo, pato, pescado, langosta, camarones", indicó.
Rendón de Lombard consideró que no se debe fallar en el término del alimento que se prepare, además de que el sazón es importantísimo, por lo que no se debe agregar mucho picante ni especias y evitar en el menú salsas, moles y chiles muy picosos.
"Por experiencia he participado en eventos internacionales con menús de comida mexicana, y lo que nunca se debe dar es un mole. A un extranjero le puede chocar por ser dulzón, picoso, tener muchas especias, la primera vez que lo prueban no es lo máximo", insistió.
A fin de destacar los sabores de México no sólo en los alimentos, también se debe ofrecer un buen vino mexicano, por lo que recomendó como aperitivo champaña con un toque de licor de Xaica, que es un licor de Jamaica.
Al principio "daría unas botanas mexicanas que consistirían en una tostadita de cheviche verde, sin chile, unos sopecitos de chilorio con dos rajas poblanas que no piquen y una quesadilla de masa azul rellena de flor de calabaza con champiñones o pollo", dijo.
Como entrada propuso una ensalada de variedad de lechugas con una codorniz adobada (pieza completa por persona), aderezadas con una vinagreta de achiote.
De plato fuerte sugirió pato en mole amarillo traído de Oaxaca, porque no es tan agresivo, ni tan dulzón, ni tan picante como el negro o el verde.
Ese mole iría acompañado de una guarnición de arroz con variedad de hongos mexicanos, pues "a diferencia de otros países tenemos una gran variedad en México y aunque ahora no es temporada se pueden encontrar deshidratados, como el morilla, además de incluir champiñones y setas", detalló.
Como bebida, la chef consideró ideal el vino de Piedra, de la Casa de Piedra de Baja California, cuya primer cosecha es de 1997. El broche de oro sería un pastel de chocolate, producto originario de México y apreciado en todo el mundo, "con crujiente de avellana con salsa de café de Chiapas o de Veracruz, o salsa de vainilla de Jalapa", cuyo precio total sería de mil pesos por persona, puntualizó Alexandra Rendón.
Hola Pedro. Me quedó nomás la duda de si el Vino de Piedra que sirvieron es el cosecha 1997, o nomás hacen referencia a que en ese año salió la primera cosecha embotellada.
ResponderEliminarInteresante que cuidan que no piquen mucho las cosas con Obama. Me imagino que entonces nos vamos olvidado de obtener "the whole enchilada". :-)
Saludos.
--Rafa Ibarra
www.elmundoderafaibarra.com
www.vinoclub.com.mx